Amor de adolescente

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Amor de adolescente: Basada en hechos reales

En este Artículo quiero contarte sobre una historia de amor de adolescentes, basada en una historia real. En la historia se usan otros nombres, para proteger la identidad de los autores.

«Un momento puede cambiar un día, un día puede cambiar una vida y una vida puede cambiar el mundo» Buda

Ella no me mira

A ella la denominaremos Carla y a él David. Carla tenía 12 años cuando conoció a David en la escuela, ella no hablaba mucho con las personas, especialmente con los hombres, les tenía miedo; y así pasaron aproximadamente 3 años, cuando en la Escuela le dicen que participe en una fiesta de gala, donde la eligen como princesa de la simpatía; era Día del estudiante, día del amor, día de la primavera. todo esto para elegir a la Miss y Míster de la escuela. Resulta que la maestra le pone de pareja de baile a David. Antes de las elecciones David ya tenía interés hacia Carla desde hace un buen tiempo; a él le encantó saber que sería la pareja de baile de Carla.

El Baile

Llegado el día de las elecciones de Miss y Míster las chicas estaban vestidas de princesas, los chicos estaban con trajes camisas y corbatas, todos elegantes. Empezaron la pasarela primero las princesas, acompañadas de sus parejas de baile para luego ingresar la reina.
David que andaba muy contento tan entusiasmado, que no se le podía disimular esa cara de felicidad, que desprendía de su mirada, tenía un amor de adolescentes. El ambiente se sintió un poco tenso, pues a Carla no le gustó la idea de bailar con David en sí con ningún otro muchacho. No le agradaban los chicos. Desde muy niña conoció la violencia familiar por lo cual pensaba que los hombres eran malos.
Las horas pasaron mientras que David y Carla seguían bailando, a ella le chocaba que David la tomara de la cintura. Su nerviosismo, el sudor de su frente y los torpes movimientos, no se podían disimular, constantemente le pisaba -Me estás pisando eres algo torpe, no me gusta bailar, ¿podrías alejarte un poco más?- decía ella y solo esperaba que acabase el baile e irse a casa.

Un flechazo al amor

Después de esa noche de baile David quedó mucho más encantado, ella era de las personas que no se arreglaba, andaba como a ella le parecía, no le importaba lo que dijeran los demás, ya sea por su forma de vestir o la ropa que llevaba, muchas veces se burlaban de ella por llevar ropa desgastada, rota y estropeada. Pero ese día en el baile, se puso un vestido muy hermoso que su madre fletó, la llevó al salón de belleza para que la peinaran y maquillaran un poco, parecía una princesa. Todos se sorprendieron de lo hermosa que estaba, hasta parecía la reina del baile.
Al verla David lo hermosa que estaba, se enamoró profundamente. Pero a diferencia de Carla que solo sintió rencor, porque a ella no le gustaba participar en este tipo de acontecimientos, ni mucho menos interés por los chicos, solamente lo hizo porque la maestra la obligó por notas.
El amor solo toco las puertas del corazón de David, intentaba conquistarla en la velada, entre hablarle y decirle cosas bonitas, aunque ya desde que la vio por primera vez le había enviado muchas cartas de amor y detalles muy románticos, a ella no le interesaba en lo más mínimo posible entablar alguna conversación con él, en sí con nadie que fuera varón.

Intentando conquistarla

Después de la fiesta de gala David ya no pudo acercarse más, pues ella ya se dio cuenta que él pretendía hablarle, y se alejaba aún más y más. Muchos intentos fueron el de encontrarla, y expresarle su amor por ella. Fueron pasando los días, las semanas, los meses, incluso los años, hasta que ella se mudó de casa en otra ciudad, David se quedó allí. Aunque Carla iba cada vacación a esa ciudad, a principios de año y a mediados de año.
Cuando ella iba de vacaciones él la esperaba ansioso intentando conquistarla, hablarle y decirle todo lo que sentía su corazón, aún tenía detalles con ella, entre cartas y regalos. En una de esas vacaciones él se dispuso a decirle todo el amor que sentía por ella.

El encuentro

Fue una noche donde ella iba caminando con su amiga, de repente se aparece él; directamente le dice: – ¿Carla podríamos hablar un momento por favor? Su amiga les dio su espacio. Él se encontraba nervioso, ella un poco molesta, al parecer se dio cuenta que él se le iba a declarar y eso es lo que no quería. Inmediatamente David sacó algo de su bolsillo y de su pecho se lo dio a Carla, era una flor y un casete (en ese entonces solo había casetes, en las que escuchabas música, grabar, etc.).
– Toma – le dijo David,  -es para ti, lo hice con mucho cariño, ahí dicen todas las cosas que siento por tí-,  pero Carla se lo devolvió, – no los quiero-, le dijo, pero él sin detenerse continúa diciendo – te amo y siempre te he amado. ¿Quieres ser mi novia?- , ella aterrorizada le dijo que no, se enojó mucho.
No quería saber nada, tenía otros  intereses, que por el momento no le interesaban los chicos; enojada no quiso escucharle más, no tenía intenciones de tener novio, más andaba pensando en otras cosas, le dijo algunas palabras hirientes a David, y se fue dejándolo ahí solo, él se puso muy triste. La amiga de Carla que observando todo se quedó a consolar a David.

La culpa

Al llegar a casa Carla estaba tan furiosa y a la vez muy triste, tarde se dio cuenta de que había lastimado a David con sus palabras, que en el momento no pudo controlarlas. Ya más noche se encuentra nuevamente con su amiga, y esta le cuenta lo que sucedió luego, él se quedó llorando se sintió muy triste y rechazado, la amiga para darle consuelo le dice a David… – no vale la pena que sufras por una chica que no vale la pena, encontraras otro amor de adolescentes-
Carla se enojó con la amiga por decir que no valía la pena, pues Carla tampoco era una mala persona, solo en ese entonces ella solo pensaba en superarse, estudiar, trabajar, y que tener novio era una pérdida de tiempo. Que a la final la amiga pidió el casete que era para Carla, y esta se la dejó para que lo escuchara. Al escuchar todo lo que contenía el casete le dio tanta tristeza, de que las canciones que componían ese casete, eran realmente muy inspiradoras.

Reflexionando ¿Qué hubiera pasado sí sí?

Que hubiera pasado si Carla hubiese aceptado ser novia de David, pues nunca lo sabremos, porque ese día ya pasó, ella ya es una persona adulta y él también. Ella recuerda con mucha melancolía y se echa la culpa por haber herido a una persona quizá una de los mejores, y aquella ocasión donde un muchacho se le declaró muy románticamente un amor de adolescentes, cosa que desde ese entonces ella no encontró otra persona que fuera tan romántico como él.

«No lastimes a los demás con lo que te causa dolor a ti mismo. “No le hagas a los demás lo que no nos gusta que te hagan»


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